Las primeras instrucciones corren a cargo de la Matemática Katie Steckles y cubren el espectro más común de formas y tamaños de regalo. Si pretendes envolver una bicicleta tendrás que apañártelas solo. Quizá lo mejor sea ponerle solo un lazo.
La clave de todo no está en la manera de envolverlo, que es bastante parecida a lo que conocemos. La clave está en cortar un pliego de papel del tamaño justo y necesario. Aquí van algunas claves:Lados cuadrados
Si el regalo tiene algún lado cuadrado, corta el papel para que al comenzar a envolverlo cubra la mitad del lado cuadrado. Así después obtendrás una x perfecta.
Si alguno de los lados es triangular, procura que el papel sobrante cubra ese lado completamente, así luego podrás doblarlo en satisfactorios triángulos del mismo tamaño.
Para cajas cuadradas como la de la imagen, Steckles propone envolverlas en diagonal. Para ello recorta un pedazo de papel cuadrado cuyo lado equivale al del regalo + 1,5 veces la altura. Al plegarlo, las cuatro puntas se unen perfectamente en el centro. Otros especialistas se lían algo más a la hora de plegar el papel, pero el formato en diagonal partiendo de un papel cuadrado es el mismo.
Sí, rodar el cilindro sobre el papel para tomar la medida es fácil pero, ¿y luego? En realidad es una cuestión de ir doblando el papel en triángulos y pegándolo poco a poco.
Un osito de peluche o cualquier otra cosa. Nada se resiste a hacer... una bolsa de papel.
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