Pasos del pensando desde el borde

Pasos del 1 al 5: Hablando desde la sensación sentida
Instrucciones principales
Detalles útiles
Paso 1. Dejar que se forme una sensación sentida

Escoge algo que tú sabes pero que todavía no puedes decir y que quiere ser dicho. Ten este saber como una sensación sentida (un borde poco claro pero sentido corporalmente con precisión) a la que siempre puedas regresar.

Escribe unos párrafos como salgan, de una manera burda

 

Lo que escojas para trabajar debe de ser de un campo en el que tú seas conocedor y tengas experiencia. No trabajes con una pregunta sino con algo que tú sabes. Hay algo que tú conoces de una manera muy general o burda, por los años de experiencia, pero de lo cual es difícil hablar… parece ilógico… marginal… no convencional…difícil… o sencillamente puede parecer que el lenguaje no funciona ahí.

Desde la sensación sentida, escribe el aspecto central en un enunciado corto, con una palabra o frase clave, aún si el enunciado no dice todo lo que quieres decir realmente.

 

Para encontrar lo central, pregunta ¿qué de esto quiero decir con claridad? Luego, dentro de esto, ¿dónde está el punto vivo para mí?

El enunciado es sólo el punto de partida. No necesitas pensarlo mucho. Por el momento establece lo central de lo que andas buscando.

 

Subraya la palabra clave o la frase en el enunciado.

Para ayudarte a encontrar la palabra clave puedes preguntar: si tuviera una teoría ¿qué palabra expresaría de qué se trata dicha teoría?

Puede ser también que quieras primero encontrar un ejemplo y luego escribir el enunciado.

 

Escribe un ejemplo.Necesitas un ejemplo concreto, un evento o un momento en el que realmente pasó eso de lo que quieres decir algo.

Paso 2. Encuentra lo que es más que lógico en tu sensación sentida

Encuentra lo que no hace el sentido lógico usual y escribe un enunciado ilógico.

Lo que parece ilógico puede ser la parte más valiosa. Por favor, asegúrate de que no dejas esto de lado.

Si tienes dificultad para escribir un enunciado ilógico, escribe una paradoja.

Una paradoja es cuando dices que algo es «x» y también no es «x».

Paso 3. Date cuenta de que tú no quieres expresar los significados usuales de las palabras

Escribe la definición usual (del diccionario) de la palabra que subrayaste y fíjate que no es eso lo que quieres decir.

 

 

Saca la palabra subrayada y escribe el enunciado con un espacio en blanco en lugar de la palabra

Reconoces que «esto no es lo que quiero decir». Esta palabra puede significar algo diferente. Si tú estás diciendo algo nuevo, ninguna de las palabras, con sus significados convencionales, lo comunicará con precisión.

Regresa a tu sensación sentida y deja que venga otra palabra para decir lo que quieres decir.

Asegúrate de que no es simplemente un sinónimo, sino una palabra con un significado un poco diferente.

Escribe la definición usual de la segunda palabra.

 

Regresa a tu sensación sentida y deja que venga una tercera palabra.

Cuando consideres el significado público aceptado de esta palabra, te darás cuenta que tampoco encaja.
Escribe la definición usual para la tercera palabra.El significado público reconocido de esta palabra tampoco expresa lo que quieres decir.
Acepta el hecho de que no existe una palabra o frase ya establecida para expresar, comunicar, este conocer que tú tienes.Ninguna palabra encaja. Ninguna debería encajar si realmente es algo nuevo lo que quieres decir.

Paso 4. Escribe un enunciado o frase fresca para decir lo que querrías que significaran cada una de las tres palabras

Escribe la primera palabra original en el espacio en blanco del enunciado del paso 1.

Aunque no puedes cambiar el lenguaje público, sí puedes escribir todo un enunciado fresco o una frase para decir lo que quisieras que esa sola palabra significara. Escribe lo que quisieras que dicha palabra expresara, significara; lo que esta palabra saca de la sensación sentida y que las otras dos no.

Esta vez no hagas a un lado tu sensación. Insiste en que tu enunciado hable desde la sensación sentida. No dejes que la palabra diga lo que usualmente dice. Espera hasta que sientas a todo el enunciado hablando desde la sensación sentida, aun cuando puede ser que la mayoría de la gente no lo entienda.

 

Ahora escribe la segunda palabra en el espacio en blanco. Escribe un enunciado o una frase para decir lo que esta palabra saca de la sensación sentida.

 

 

Haz lo mismo con la tercera palabra.

Necesitarás frases nuevas y frescas para decir lo que querrías que la palabra significara en el enunciado. Más que buscar palabras de uso común, deja que una frase nueva venga directamente desde la sensación sentida.
Paso 5. Expande lo que quisieras que significara cada palabra, escribiendo enunciados frescos y lingüísticamente inusuales

Utilizando las principales palabras o frases del paso 4, escribe ahora uno o dos enunciados un tanto extraños, diferentes, para ampliar más lo que quieres decir ahora con cada una de esas palabras y frases.

 

 

 

En cada enunciado nuevo, subraya lo que es nuevo e importante.
Verifica si en el Paso 4 utilizaste alguna palabra muy usada en la vida cotidiana. Si así fue, escribe frases nuevas y frescas para reemplazar esas palabras. Deja que lo que es nuevo y específico en tu sensación sentida se exprese en un lenguaje dicho con frescura. Puede ser que tus enunciados no se comprendan, a menos que se entiendan en la forma como tú quieres. Aquí están algunos ejemplos de enunciados lingüísticamente inusuales: «Conocer las reglas es un contenedor desde el cual se abren nuevos caminos». «Las definiciones detienen el crecimiento celular». «Com-portarse muestra algo que tiene». Si dejas hablar directamente a tu sensación sentida, algo inusual lingüísticamente puede venir.
Escribe «un conjunto» con las tres palabras originales y las principales frases frescas en el espacio subrayado en el enunciado del paso 1. Al final del conjunto agrega «…». Ahora tienes una elaboración de lo que estás tratando de decir.

Juega con la gramática y el orden. Elimina las palabras que sobren hasta que tengas un enunciado que te satisfaga.

 

Los «…» significan que estás tomando la sensación sentida junto con todas las palabras.

Pasos del 6 al 8. Encontrando patrones desde los diferentes aspectos o facetas («ejemplos muestra»)
 

Paso 6. Reúne «ejemplos muestra»

Reúne ejemplos que hayan ocurrido que muestren alguna faceta, una especie de «ejemplo muestra».

Escoge tres facetas o aspectos y escríbelos con los detalles que se relacionen con tu sensación sentida. Subraya lo específico que traiga algo que tú quisieras conservar.



No es necesario que un «ejemplo muestra» ilustre todo lo que hay en tu sensación sentida. Un «ejemplo muestra» puede ser cualquier cosa que se relacione con tu sensación sentida, incluyendo los momentos en que eso ha aparecido, cuando alguien lo dijo, o cualquier otro incidente, aún si no te puedes explicar por qué ello es relevante. Incluye cosas privadas o raras, tales como «El momento en que el dentista dijo…». Pregúntate «¿qué ha sucedido alguna vez que tenga que ver con ello?»

Copia tu «ejemplo muestra» original del paso 1 aquí. Ahora tienes cuatro «ejemplos muestra».

 

 

Ideas generales y metáforas no son «ejemplo muestra». Un acontecimiento que realmente sucedió no puedes decirlo en términos de «es como calentando algo para agitarlo».

Un ejemplo es mejor que cualquier generalización de orden superior porque tiene una especificidad interna. En cualquier evento de la vida real tú puedes descubrir algunas estructuras complejas que están ahí.
Paso 7. Permite que los «ejemplos muestra» contribuyan a identificar la estructura o el patrón

Con cada uno de los «ejemplos muestra»:

Fíjate que hay muchas relaciones intrincadas, complejas, entre los detalles. Encuentra una relación entre algunos detalles que sea relevante para tu sensación sentida.

En cualquier experiencia actual hay relaciones entre los detalles que pueden darte una nueva elaboración. Deja que cada «ejemplo muestra» te de un patrón específico que no tenías antes.

Aplica esta relación a un tipo de situación totalmente diferente.

 

 

Ahora expresa esta relación en términos generales, de manera que pueda convertirse en un patrón que se aplique a muchas otras situaciones.

 

Ejemplo: el dentista tenía su dedo en mi boca, sosteniendo un pedazo de algodón, mientras me decía sus ideas políticas. Los niños, los empleados y los prisioneros no tienen poder para responder cuando no están de acuerdo. Hablarle a una persona que no puede responder puede ser intrusivo o abusivo.

Paso 8. Cruza los «ejemplos muestra»

Viendo desde el segundo «ejemplo muestra» podrías preguntar: ¿qué hay en el primero que no había podido identificar considerándolo sólo desde sí mismo?

 

Puede ser que ya lo hayas hecho antes. «Cruzar» significa atribuir el punto de un «ejemplo muestra» a otro. ¿Qué nuevo aspecto del primer «ejemplo muestra» podría hacerse visible si tratas de decir que tiene el patrón del segundo «ejemplo muestra»?

 

Escribe un enunciado para registrar cualquier nuevo patrón que quieras conservar.

«Cruzar» dos cosas significa considerar una como si fuera un ejemplo de la segunda. Y tal vez puedas conseguir algo más si consideras a la segunda como un ejemplo de la primera.

Si ninguno de los «ejemplos muestra» contiene todo el núcleo central del asunto, dicho núcleo puede hallarse al cruzar los «ejemplos muestra».

Paso 9. Escribe libremente

Escribe libremente lo que estás pensando en este momento.

 

Este es un espacio libre para que escribas hasta dónde has llegado, lo que has entendido, lo que te emociona.

Pasos del 10 al 14. Construyendo una teoría

Ahora, hemos logrado uno de los propósitos de PDB/TAE, a saber, articular un conocimiento implícito y hacerlo comunicable. Si quieres, puedes continuar construyendo una teoría formal, lógica.

Paso 10. Escoge algunos términos y relaciónalos

Escoge tres palabras o frases para que sean, temporalmente, tus términos principales. Nómbralos «A», «B» y «C».

Un término no es un enunciado. Por ejemplo: «algo que se mueve desde adentro» es un término. Un enunciado siempre tiene al menos dos términos, sujeto y predicado.

Observa las palabras, frases y patrones de todos los pasos anteriores. Haz una lista de todos los posibles candidatos para términos principales. Escoge los que se sientan más importantes.

Imagínate un triángulo conectando los tres términos. Escoge los términos de tal manera que la mayor parte de tu territorio y el núcleo central estén dentro de ese triángulo. Puedes traer otras ideas importantes más adelante, en el paso 12.

Ahora define A en términos de B y también en términos de C. Escribe primero cada ecuación como una fórmula vacía: «A=B», «A=C». Reemplaza el signo = con la palabra «ES». Escribe ahora las palabras que correspondan a las letras A, B y C. Ahora tienes dos enunciados que podrían ser completamente ciertos o completamente falsos.

Puesto que los términos vienen desde la misma sensación sentida, habrá un modo en el que esta conexión sea verdadera.

Si es necesario modifica los enunciados. Conserva la palabra ES para mantener el lugar donde emergerá el nuevo patrón. No establezcas las relaciones en términos de conexiones viejas y familiares. Asegúrate de que conservas lo central, el núcleo, de tu sensación sentida.

Deja estar el enunciado, si es gramaticalmente adecuado y es verdadero, y si habla desde tu sensación sentida. Si no, conserva la palabra «es» («son») y cambia o agrega lo menos posible, de tal manera que la afirmación sea verdadera y hable desde la sensación sentida. Por ejemplo, en lugar de decir «A produce B», puedes decir «A es algo que produce B». Si el enunciado parece demasiado incluyente, puedes decir «Algo de A es», «Al menos A es», «A es una clase de B».

Ahora tienes un enunciado verdadero que conecta A con B y otro que conecta A con C.

Ahora puedes jugar libremente con muchos enunciados posibles que relacionen los términos principales. Puesto que A=B y A=C, quizás B es alguna clase de C, o C alguna clase de B, o B que tiene A es alguna clase especial de C. Puedes jugar con una lógica abierta, no fija.

Aún sin lógica, siéntete libre de hacer enunciados en los que dividas los términos, los combines o hagas uno o dos términos nuevos.

Puedes guiarte poniendo toda tu atención en el ES entre los términos que expresan lo central de tu sensación sentida.

Termina el paso 10 cuando lo central de tu sensación sentida esté expresado por dos o tres términos con el ES entre ellos.

Escríbelos como «A ES B» y «A ES C».

 

Tu compañero puede ayudarte sugiriendo enunciados que conecten tus términos, de manera que puedas responder con más precisión desde tu sensación sentida.

 

Paso 11. Pregunta por las relaciones inherentes entre los términos

Agrega la palabra «inherentemente» después del «ES» en cada uno de los dos enunciados. A ES inherentemente B. A ES inherentemente C. Aquí todavía no sabes lo que esto significa.

Puesto que «A» y «B» vienen desde la misma sensación sentida, encontraremos que «A» es «B» inherentemente y no sólo que ocurre que «A» es «B».

El lazo inherente no es algo que ya sea bien conocido en el espacio público. Es más bien tu significado de A que ya es algo que está en B. Por ejemplo: ¿Cuál es la habilidad de esperar que es inherentemente algo que permite un nuevo crecimiento? El lazo inherente no es el hecho público, obvio, que esperar requiere tiempo y que el tiempo se necesita para el crecimiento. El lazo o vínculo inherente que se encontró en este ejemplo fue: «esperar es un regalo de poner atención, y el regalo de poner atención es algo que propicia un nuevo crecimiento». Aquí, el «regalo de poner atención» es el término nuevo.

 

 

Ahora entra en la complejidad de la sensación sentida para tratar de encontrar por qué A es inherentemente B. ¿Cómo estas dos cosas están conectadas inherentemente? ¿Cuál es la naturaleza específica de A que tiene que ser B, o que tiene que estar en esta relación con B? Escribe lo que encuentres. Dale un nombre a la conexión inherente. Ahora tienes un lazo entre A y B. Este lazo es un nuevo término.

 

Esto requiere que entres a la sensación sentida detrás de los dos términos. Pregunta ¿qué es A? ¿qué es B? Descubres algo en lo que tu significado de A está ya en tu significado de B. Tiene que darse un: « ¡Ajá, por supuesto!» A siempre fue algo que tenía que estar en (o ser) B".

Puede ser que encuentres «A es X y ajá, me doy cuenta que B es también X». Así, puesto que ambos son X, los dos están inherentemente relacionados. X es el lazo o vínculo inherente entre A y B.

 

Haz lo mismo con «A es inherentemente C».

Una teoría generada con el PDB es tanto lógica como experiencial. El signo de igual no elimina la diferente complejidad de cada término. Por esto, hacer la ecuación puede ser emocionante e informativo. Del lado de la lógica formal, los dos términos son intercambiables, pero del lado experiencial la ecuación inherente es una comprensión. No es realmente una ecuación de unidades idénticas como 1=1.

Paso 12. Escoge términos permanentes y entrelázalos

Con frescura construye tu cruce «ilógico». Pregúntate cómo debería decirse tu cruce central utilizando algunos de los términos y lazos inherentes encontrados en el paso 11. Formula un enunciado de tal manera que uno de los términos principales «SEA» una combinación de los otros términos que usaste para establecer tu cruce.

Escoge los tres o cuatro términos principales. Podrás traer otros términos después.

Ahora toma el término que sigue al «SEA» del enunciado cruce de arriba. Reescribe el enunciado cruce para afirmar que este segundo término ES una combinación de los otros términos en el enunciado.

 

 

Ahora haz lo mismo con el tercer término. Cada término está ahora definido en un enunciado que es una combinación de los otros dos términos.

A esto es a lo que le llamamos «entrelazar» los términos. El cruce ilógico es definido en cada término y no sólo entre ellos. Terminarás escribiendo enunciados con la forma de: A ES B que a su vez ES C, B es A que a su vez ES C, y C es A que a su vez es B, o alguna variante de esto.

Considera cada enunciado en esta rotación. ¿Realmente expresa el significado que tú le das a cada término? Aún cuando el enunciado parezca decir lo mismo pero en un orden diferente, probablemente encuentres que alguno de ellos necesita mayor especificidad, lo que te permitirá establecer términos con lazos más inherentes para expresar lo que quieres decir.

Uno necesita preguntarse: ¿Es esta una definición sensible de ese término? Esta pregunta lleva al descubrimiento de significados más específicos y de términos que enlazan.
Si has desarrollado mayor especificidad en cualquier enunciado, incluye los agregados también en los otros enunciados. Como defines ahora los otros términos incluye los cambios y agregados que haz hecho en cualquiera de los términos. Esta es una manera como tu teoría se puede desarrollar más.

Puesto que A es B que a su vez es C, si has agregado D en la manera como defines C, entonces ahora A es definida como B que a su vez es C y D. Así que necesitas asegurarte de que esto encaja con tu sensación sentida de A y B. Si no es así, necesitas cambiar o agregar algo. Estás construyendo relaciones lógicas nuevas entre términos nuevos así que no se trata de imponer las relaciones usuales entre ellos.

Una vez que tienes un término, manténlo igual cada vez que lo uses. La potencia lógica depende de que el término permanezca igual. Posteriormente podrás construir diferentes versiones dichas con otras palabras, por ejemplo en cartas, artículos o en conversaciones.

Ahora pregunta cuál de las frases de las fases anteriores necesita tu teoría de modo que pueda decir lo que pretendes que diga. Agrégalas, una por una. Deriva cada una de los términos que acabas de definir. «Derivar» significa encontrar la relación inherente entre el nuevo término y uno de los anteriores. Escribe y explica la relación inherente.

 

 

Ahora que los términos están lógica y experiencialmente enlazados puedes generar frases interesantes sustituyendo los términos de la siguiente manera: Si F=A y A=B entonces F=B. La frase F=B es nueva.

 

Es emocionante porque puedes darte cuenta de que vas a poder derivar y definir cada nueva cosa desde tu núcleo teórico. El patrón de tu teoría entra en cada nuevo término y puede dar explicaciones internas de él.

Cada nuevo término se hace inherente en los otros a través de los enlaces lógicos. Verifica si esto está de acuerdo con tu sensación sentida.



Mediante la substitución puedes desarrollar el poder inferencial de una serie progresiva de frases que llevan a ciertas conclusiones. Las conclusiones pueden ser aceptables o no, a tu sensación sentida. Si no son aceptables, entra de nuevo a tu sensación sentida para que hagas una nueva distinción. De esta manera el poder de la lógica y de la experiencia ayudan a elaborar tu teoría.

 

 

 

 

Repite estas instrucciones tantas veces como sea necesario para traer los términos que necesitas de los pasos anteriores.

 

 

 

De una manera informal, algunas de las palabras o frases que todavía no has utilizado pueden ser agrupadas con uno y otro de los términos principales; con el que pudieran ser equivalentes. Luego puedes substituirlas para generar más enunciados que se sigan lógicamente.

 

Algunas substituciones pueden sorprenderte y ampliar tu teoría. Cuando tienes un nuevo enunciado pero te parece equivocado o falso, señala lo que parece estar mal y cámbialo, sin perder lo que era nuevo en dicho enunciado. Ejemplo, supongamos que por substitución obtienes que F es B. Esto podría parecer gramaticalmente incorrecto y falso pero puede ser interesante volver a pensar la naturaleza de «B». ¿Podría tener «B» este patrón extraño? ¿Cómo podría ser eso cierto de «B»? Entonces -¡sorpresa!- podría aparecer repentinamente para ti que así es. Podría decir de la naturaleza de «B», algo más de lo que ordinariamente se conoce.

Una vez que existe un sistema lógico, sus inferencias son «formales»; esto quiere decir que las inferencias se dan desde las conexiones lógicas, independientemente de los contenidos. Si tus términos llevan a una inferencia lógica «apretada» que tu sensación sentida no acepta, entonces es necesario cambiar algo. En esta etapa, hacer cambios pequeños o incluir algunos términos adicionales generalmente ayudan a corregir lo que haga falta. Si no sucede esto, entonces hay que volver a abrir todo el sistema lógico. Si los cambios funcionaron, conserva cerrado el sistema lógico para que pueda operar. Cuando el sistema funciona tanto lógicamente como de acuerdo con la sensación sentida, entonces sus inferencias «formales» pueden ser poderosas, sorprendentes y significativas.
Paso 13. Aplica tu teoría fuera de tu campo

Este paso es un intermedio, un «descanso».

 

El nuevo patrón, en tus términos, puede servir como un modelo. Aplica el patrón a una o más áreas, más amplias, como el arte, la religión, la educación, la metáfora.



¿Cómo podría permitirte tu patrón decir algo acerca de la naturaleza humana, la sociedad, el estado, los grupos, las relaciones interpersonales, la física, la verdad, la belleza, la ética, el escribir, la sexualidad, el lenguaje, o cualquier otra idea?

En el ejemplo del dentista del paso 7, el patrón aplicado a la educación podría ser: una educación no-intrusiva, requiere de un papel activo de parte de los estudiantes.

 

Escribe un enunciado con esta forma: Algo acerca de __________ (un aspecto de algún tópico) es como ______________ (tu patrón). Ahora, espera a que algo cambie repentinamente y que haga verdadero al enunciado. Escribe una explicación de lo que encuentres.

Por ejemplo: «Algo acerca del aprendizaje (un tópico) es como el interior teniendo dos exteriores» (el patrón).

También un tópico pequeño o un evento podrían ser comprensibles de una manera nueva e interesante a través de tu teoría.

Sabemos que el patrón que has articulado puede darse en la experiencia humana puesto que sucedió en tus «ejemplos muestra». La aplicación de tu teoría puede revelar algo que es o debería ser verdadero.
Paso 14. Amplía y aplica tu teoría en tu campo

Este es el desarrollo serio de tu teoría. Puede continuar por años. Para ampliar tu teoría puedes preguntar: ¿cuál es la siguiente pregunta que surge, o hacia que otra mejor comprensión podría llevar la teoría, qué factores relacionados de una manera cercana no están cubiertos aún?

 

Si es necesario, agrega enlaces inherentes, de manera que se puedan derivar términos que puedas agregar posteriormente.

 

Si tu teoría implica algo que no quieres decir, ¿qué otro término o distinción podría corregir eso?

Recordar un ejemplo actual puede ayudarte a formular una nueva distinción o diferenciación.

Una vez que una teoría se desarrolla, pueden seguirse otras distinciones e implicaciones sin que tengas que inventarlas. Entonces pregunta: ¿qué es esto? y podrás darte cuenta de repente que has derivado una cosa importante sobre la que ni siquiera habías pensado.

Una vez que enlazas un nuevo término ve, por substitución, lo que pueden decir de él tus otros términos.

De esta manera tú puedes seguir ampliando tu teoría más y más.

A veces tu teoría rehusa algo que se esperaría, o que podría ser elegante o bonito. Puesto que tu teoría surge de las conexiones complejas implícitas en la sensación sentida, cuando la contrastas con ella puedes encontrar las razones.

Aplica tu teoría a cualquier área u observaciones relacionadas en tu campo, respecto a las cuales quisieras explicar o clarificar algo. ¿Dónde podría hacer tu teoría una diferencia importante? Define esto con frescura en términos de tu teoría.

 

 

Tu nuevo patrón puede reestructurar cualquier aspecto específico de tu campo.

Estas creando nuevos conceptos. No permitas que las definiciones fijas, o las viejas manera de pensar limiten lo que dices, aún si tu tópico está dentro de una categoría mayor con una perspectiva bien establecida. No dudes en reestructurarlo como lo hiciste con un área amplia en el paso 13. Le llamamos a dicha reestructuración un «cambio en sentido contrario» de la forma usual como cualquier cosa nueva y específica tiende a ser subsumida rápidamente por los presupuestos existentes de un tópico más amplio. Puede darse el caso, por ejemplo, que un cambio en un concepto específico sobre los monos puede requerir una reestructuración de la zoología en su conjunto.

A veces la gente piensa que su nueva teoría «debe ser» lo que alguna otra teoría vieja, ya existente, « realmente significa», si se entiende correctamente. Pero la vieja teoría sola no le da a la gente esta comprensión precisa.

La función de una teoría es social. Ser capaz de hablar con precisión desde tu sensación sentida construye tu comprensión dentro de nuestro mundo.

 

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